Cada vez son más y más las personas y empresarios que se deciden a crear aplicaciones móviles en Colombia para así promover sus empresas y los diversos bienes y servicios que ofrecen al público.
Actualmente, esta decisión figura como una de las mejores opciones a tomarse en el mundo de mercadeo y ventas. Esto debido a que la mayoría de la población posee smartphones, tablets y portátiles con las que pasan una gran parte del día metidos en internet.
Tanto es así, que el estudio “IMS Mobile en Latinoamérica” realizado por ComScore, arrojó que 9 de cada 10 latinoamericanos tienen o utilizan un dispositivo móvil de manera constante (por no decir diaria), y que éstos poseen alrededor de 15 aplicaciones en el mismo, entre las que se encuentran los juegos más populares y también Apps de sus empresas favoritas.
De esto no dudamos. Para nadie es un secreto que la tecnología forma parte de nuestro día a día y andar con un teléfono o Tablet en la mano es una de las cosas más comunes y normales en el mundo de hoy.
Tanto jóvenes como niños y adultos se confiesan adictos a los smartphones y esclavos de las diversas aplicaciones de ocio, informativas y de compras que se encuentran en las tiendas virtuales como la App Store o la Play Store. Atrás quedaron los días en que los teléfonos sólo se usaban para llamadas y mensajes de texto, y las computadoras para correos y chats.
Las ventas realizadas por internet suelen ser más fáciles y rápidas, especialmente para los emprendedores. Sin embargo, este tipo de comercio va creciendo cada vez más y buscan nuevas formas de mantenerse entre las primeras opciones de los consumidores.
En Colombia, por ejemplo, el Ministro de Tecnologías de la Información y Comunicaciones David Luna ha invertido un total de 44.639 millones de pesos en el programa Apps.co que permite la creación de nuevas compañías que trabajen en aplicaciones móviles, páginas webs, diversos softwares y demás contenidos digitales enfocados en la población colombiana.
Según cifras del Ministerio que representa Luna, actualmente hay alrededor de 17 mil jóvenes graduados en cursos de programación y 738 ideas innovadoras de diversos tipos de Apps.
Entre las aplicaciones más exitosas creadas por colombianos, tenemos:
- Quick Graph: Esta app ayuda a resolver ecuaciones tanto matemáticas como físicas, saca variables y muestra gráficas 3D. Desde su lanzamiento en 2009, ha sido descargada a nivel mundial por más de 6.6 millones de usuarios.
- Tappsi: Trabaja bajo un concepto similar al de Uber. Esta app sirve para encontrar un servicio de taxi en Bogotá, de forma segura.
- Typic: Esta es una app para ponerle captions o pies de fotos a las imágenes. Desde que fue lanzada, en el año 2012, ha sido descargada más de 3 millones de veces.
Luna cree fervientemente que la creación de nuevas aplicaciones es el primer paso hacia lo que él mismo nombró “la nueva economía digital”. Esto debido a la gran cantidad de especialistas en el mercado online que aseguran que las aplicaciones móviles son la mejor opción en cuanto a los procesos de ventas.
Según el último informe de la empresa estadounidense de investigación y análisis, Gartner, tan sólo durante el año 2015 fueron descargadas un total de 103.000 millones de aplicaciones a nivel mundial. Para este año se espera que esa cantidad de descargas se triplique, al igual que los ingresos generados por ellas.
Sin embargo, poco tienen que ver dichas aplicaciones con empresas o compras. Los expertos en telecomunicaciones destacan que la mayoría suelen ser de juegos, informativas o de comunicación.
Es por esta razón que éstos mismos expertos temen que los empresarios vean a la tecnología como un abismo. Es decir, no logren adaptarse a la tecnología que los envuelve y se estanquen en las formas tradicionales de venta, causando un declive en sus ingresos.
El mayor reto que tiene el empresario actual colombiano es conseguir una buena empresa que lo asesore en cuanto a lo que busca con la creación de su aplicación móvil. Lo más importante es tener en claro que esto suele ser muy sencillo una vez que se cuenta con la información necesaria.
Algunos emprendedores confían en la publicidad móvil como una buena fuente de ingresos pero a la larga esto no da muy buenos resultados. Lo más recomendable es buscar fórmulas “freemium”, que fusionan las descargas gratis con las compras que se generan a través de la aplicación en cuestión.
Lo primero que se ha de tomar en cuenta es que las aplicaciones deben cumplir principalmente dos funciones clase:
Atractiva: Lo suficiente como para llamar la atención del consumidor e incitar a su descarga.
Funcional: El servicio debe ser óptimo tanto dentro como fuera de la aplicación. Aquí nos referimos a la respuesta de comentarios y aceptación de sugerencias. Por ejemplo, si el clamor general es que hay un error en la App, se debe trabajar en resolverlo de manera casi inmediata. De esta forma, el usuario se sentirá importante ya que su queja fue escuchada y resuelta a la brevedad posible.
Alejandro Silva, miembro del equipo de Desarrollo de GeneXus, destaca que el mercado de las aplicaciones es muy amplio y este puede llegar a convertirse en un negocio rentable si se elige el modelo adecuado a nuestro target principal.
Así mismo, Silva describe los diversos tipos de monetización de las apps con las que trabajan la mayoría de los desarrolladores:
Free: No se cobra por descargas y todas las funciones están disponibles. Es mayormente utilizada en su comienzo, para generar una base de usuarios.
Freemium: Como ya lo mencionamos en el texto, este tipo de descarga es gratis y está vinculada con compras hechas dentro de la aplicación.
Paid: Se paga por su descarga pero no se realizan compras dentro de la app. Es necesario un buen trabajo de marketing para lograr que los usuarios la descarguen.
In-App: Este tipo suele ser usado en los juegos. Se ofrecen bienes virtuales que suelen ser cancelados con una moneda virtual, propia de la aplicación.
Ads: Este modelo genera las mayores ganancias y es el ideal según Steve Jobs. Dentro de la app aparece la publicidad pagada de algún anunciante y el usuario puede explorarlos sin salirse de ella.